Un decreto firmado por el gobernador Rogelio Frigerio y el ministro de Salud, Guillermo Grieve, fechado el pasado 17 de septiembre, dispone un sumario a la jefa de Farmacia del Hospital San Martín de Paraná, a partir de una denuncia presentada por la directora, Emilia Sattler.
La nueva responsable del efector denunció en abril de este año diversas “irregularidades, tensión severa entre la Jefa del Servicio y el personal, ausentismo de la jefa, aparentes malos tratos a terceros y medidas de fuerza, irregularidades administrativas contables, inconvenientes con proveedores, alta tasa de ausencia del personal por otorgamiento de licencias sin planificación” e incluso “faltante de medicamentos”.
Entre muchos antecedentes que cuestionan el desempeño de la farmacéutica el decreto menciona una nota de una técnica de la Farmacia que da cuenta de ”descoordinación interna entre dicho servicio y el quirófano, esencial para el funcionamiento hospitalario”. Se acusan “demoras administrativas en la compra de insumos médicos” para proveer a los servicios internos del efector.
Mientras tanto, ya existe un sumario en curso para los sectores Depósito y Farmacia del Hospital por el robo de medicamentos y presunto peculado de parte de tres agentes que están bajo Investigación Penal del Ministerio Público Fiscal. Esta causa incluyó un resonante allanamiento en mayo pasado y los acusados por ahora fueron desafectados de esas áreas y trasladados a otros sectores del hospital.
La acusación contra la Jefa de Farmacia cubre a otros directivos superiores del hospital. “Más allá de la responsabilidad de las autoridades del hospital, existe una responsabilidad concreta y profesional administrativa de quien ejerce la jefatura del servicio cuestionado”, indica.
Le achacan que su conducta y omisiones contribuyeron al “desorden general del servicio y su mal funcionamiento, que es crítico para la salud de la población, con perjuicio evidente a los pacientes y al funcionamiento” del hospital.
Otra denuncia de la Dirección del Hospital contra la jefa de la Farmacia, dirigida a la Secretaría de Salud, la culpa por no controlar “el stock ni el vencimiento de las drogas que se le suministra a los pacientes”, incumplimiento que según dicha nota la responsable del servicio justificó por la “falta de personal”.
El decreto publicado este martes consigna que la conducta podría ser causal de cesantía por “negligencia manifiesta, omisión reiterada o faltas graves en el desempeño de sus funciones” y por incumplir obligaciones de la ley de Carrera Profesional Asistencial Sanitaria. Entre otras: prestar el servicio “con diligencia y eficiencia en las condiciones de forma, tiempo, lugar y modalidades que determine la Superioridad”; cumplir con horarios y protocolos; comunicar a la Superioridad “todo acto o situación que pudiera causar perjuicio al Estado o configurar un delito”; y “cuidar el instrumental y los materiales afectados a sus funciones”.
