En términos reales, el proyecto de Presupuesto 2025 estipula que la inversión con fondos nacionales en educación tendrá un incremento de fondos en 2025 de un 0,65%, tras una disminución del 40,20% en 2024 respecto de 2023. La educación superior recibirá el 66,5% del presupuesto de la Secretaría de Educación, seguido por el Plan Nacional por la Alfabetización que recibirá el 11,6%.
Los datos surgen del informe “Presupuesto educativo nacional 2025”, con autoría de Javier Curcio (FCE/UBA, IIEP – UBA CONICET), María Sol Alzú y Leyre Sáenz Guillén (Observatorio de Argentinos por la Educación).
Para analizar la evolución de la inversión en los últimos años, se consideran los datos del Presupuesto Abierto del Ministerio de Economía sobre el crédito ejecutado en 2023 y sobre el crédito vigente (al 22 de septiembre) para 2024. Para 2025, se utiliza el proyecto de Ley de Presupuesto que presentó el presidente Javier Milei en el Congreso.
En el período 2023-2024 hubo una fuerte caída en términos reales en el gasto de la Secretaría de Educación (-42,99%). Para 2025 se espera que el presupuesto de la Secretaría de Educación varíe un 6,87% respecto al cierre proyectado para 2024, según la inflación considerada en el proyecto de ley. Si se considera la inflación del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), en 2025 habrá una nueva caída de la inversión en términos reales de la Secretaría de Educación de 1,18%.
De acuerdo con las proyecciones oficiales, la Secretaría de Educación tendrá un incremento de fondos en 2025 de 6,87%, superada por el Ministerio de Salud (146,75%), Obligaciones a cargo del Tesoro (27,64%), Presidencia de la Nación (13,58%) y Poder Judicial (6,97%).
El Ministerio de Educación recibió el 6,36% del presupuesto nacional en 2023, mientras que en 2024 la participación de la Secretaría de Educación se redujo al 4,60% del presupuesto. En 2025 está previsto que reciba el 5,12%. El conjunto de las áreas restantes del Ministerio de Capital Humano percibirán el 50,67%, Servicios de Deuda Pública el 10,06%, Obligaciones del Tesoro (9,06%) y Ministerio de Economía (6,64%).
“Se requiere dotar de financiamiento adecuado a cada nivel de gobierno para avanzar en el camino de superar la tragedia educativa que atravesamos”, afirma Javier Curcio, investigador del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de UBA Conicet y coautor del informe.
Los únicos dos programas de la Secretaría de Educación que experimentarían un incremento real en 2025 son “Gestión educativa y políticas socioeducativas” (14%) y “Desarrollo de la educación superior”. Este último, correspondiente a las universidades, tuvo una disminución del 30% entre 2023 y 2024 y tendrán una recuperación marginal del 2% en 2025.
En 2025 se asignan por primera vez fondos del presupuesto al “Plan Nacional de Alfabetización” y se eliminarán los programas “Mejoramiento de la calidad educativa”, “Conectar Igualdad”, “Fortalecimiento territorial” y “Acompañamiento de organizaciones educativas”.
El Plan Nacional de Alfabetización tiene una participación significativa en el presupuesto de la Secretaría de Educación (11,6%), ubicándose por detrás de “Desarrollo de la educación superior”, con el 66,5%.
“La eliminación del programa Conectar Igualdad es sin duda una medida regresiva muy fuerte, más cuando se considera que el 66% de los y las niñas menores de 14 años son pobres y tienen escasas posibilidades de lograr una alfabetización digital acorde con los umbrales de ciudadanía del siglo XXI”, señala Jorge Lo Cascio, economista y magíster en Educación.
