Los niños de las divisiones formativas se volvieron “locos” al ver a sus ídolos en el predio donde entre Boca. Cuando vieron al delantero uruguayo, Edinson Cavani se volvieron locos. Los chicos se desparramaron y el goleador los ayudó a levantarse.
Además del delantero, la mayoría de los jugadores saludaron a los pequeños que estaban entrenando en una de las canchas del predio de Ezeiza donde Boca tiene toda su cantera.