El actor estadounidense James Earl Jones murió a los 93 años en su casa de Nueva York y dejó un histórico legado en el mundo del cine luego varias decenas de años como estrella de Hollywood y un histórico paso por Star Wars como la voz del villano Darth Vader.
Si bien no se reveló la razón que ocasionó su fallecimiento, James Earl Jones sufría de diabetes mellitus tipo 2 desde mediados de los ’90. Esto podría haber generado este triste desenlace, aunque hasta que su familia no comunique qué ocurrió será todo una mera especulación.
Su papel más conocido fue como la icónica voz de Darth Vader en las siguientes películas de Star Wars: Episodio IV – A New Hope (1977), Episodio V – The Empire Strikes Back (1980), Episodio VI – Return of the Jedi (1983), Rogue One (2016) y Episodio IX – The Rise of Skywalker (2019). Es importante aclarar que quien interpretó físicamente a esa versión de Anakin Skywalker fue David Prowse, mientras que Sebastian Shaw fue el que mostró la cara cuando le quitan el casco en el tercer film.
Si bien su papel en Star Wars fue el éxito más grande del que participó, también le dio la voz al personaje Mufasa en las películas del Rey León: 1994, 1998 y 2019. Por todo esto y más, Hollywood ha perdido una de sus principales figuras y no será para nada fácil llenar el vacío que deja su partida.