El Senado votó el rechazo al DNU de Javier Milei, que le otorgaba fondos reservados por $100.000 a la SIDE y se consumo un hito: por primera vez, el Congreso bajó un decreto presidencial. Tras el nuevo revés legislativo, desde el Gobierno acusaron a los senadores.
“La Oficina del Presidente condena el voto irresponsable de un grupo de legisladores que dejaron al Sistema de Inteligencia argentino sin recursos en un momento histórico del país”, indicaron.
“El rol de la agencia de inteligencia durante décadas estuvo basado en intereses personales, y fue utilizada para actividades espurias como el espionaje interno, el tráfico de influencias y la persecución política”, agregaron.
Y concluyeron: “Los responsables del desfinanciamiento del Sistema de Inteligencia deberán hacerse cargo de cualquier hecho que ocurra hasta que la SIDE esté correctamente financiada y pueda recuperar sus capacidades vitales”.