Este miércoles 22 de febrero Facundo Siegfried fue condenado a prisión perpetua por el femicidio de la joven Alejandra Rucu Silva en la capital entrerriana, quien era en ese momento su pareja. El Tribunal de Juicio y Apelaciones de Paraná -integrado por Alejandro Grippo, Gervasio Labriola y Walter Carballo- lo condenó por el delito de Homicidio doblemente agravado por el vínculo y por violencia de género.
De esta manera, se echa por tierra el acuerdo firmado en 2019 en juicio abreviado, en el que el imputado había recibido la pena de 18 años de prisión por el crimen de su pareja. Cabe recordar que la joven fue asesinada de un disparo en la cabeza en barrio El Morro de Paraná el 24 de septiembre de 2018, día en que cumplía 28 años.
El primer acuerdo en juicio abreviado se había celebrado en octubre de 2019. Había sido alcanzado entre la defensa del femicida y el fiscal Pablo Zoff en la sala de audiencias de los Tribunales de Paraná. "La calificación es homicidio simple. No se pudo alcanzar la figura de femicidio atento a la precariedad de la relación entre el homicida y la víctima", había informado entonces el fiscal Zoff.
Finalmente, tras las instancias de apelaciones, se llevó a cabo el juicio en el que este martes se dispuso la nueva condena de prisión perpetua, bajo la figura del femicidio.
image.png
El hecho
Alejandra Silva, conocida como "Rucu" o "Ruqu", cumplió 28 años el lunes 24 de septiembre, el mismo día que alrededor de las 19.30, la mataron de un disparo en la cabeza con un arma calibre 11-25 en calle Du Graty al final, en barrio El Morro de Paraná. La joven era madre de dos nenas menores de edad, de 2 y 9 años, con quienes subía fotos a sus redes sociales.
El hecho ocurrió en una casa ubicada en calle Dugratty, en barrio El Morro, en una calle de tierra que a la izquierda tiene la casa de la familia del imputado y lugar del hecho, y a la derecha una barranca.
Allí estuvo Silva y su hermano Martín, que en el inicio de la causa estuvo sospechado, pero luego fue desvinculado. En aquel momento, los hermanos se encontraban cumpliendo un arresto domiciliario por una causa por narcomenudeo.
Siegfried reconoció que el día del hecho, cuando cumplía arresto domiciliario con su hermano y su sobrino por una causa por narcomenudeo, en la que terminó condenado, mantenía un “negocio” con Silva y su hermana, consistente en la entrega a las jóvenes de cocaína para comercializar. También reconoció que el día del hecho andaba armado por protección por el ataque en el que fue herido de bala, un tiempo atrás.