Un gran agujero se formó durante la noche del sábado en un área de camping de la Playa Rainbow, de Queensland, Australia. Tiene 150 metros de largo, 50 de ancho y 3 de profundidad. El cráter se tragó un auto, una casa rodante y carpas. No hubo víctimas fatales ni desaparecidos.
Efectivos de seguridad acudieron al lugar para auxiliar a los turistas. Evacuaron a alrededor de 140 personas y señalizaron la zona por temor a que se amplíe el socavón. En 2011 ya había ocurrido un hecho similar en el mismo sitio. Este tipo de agujeros son el resultado de lo que se conoce como erosión kárstica y tiene lugar cuando una capa rocosa del suelo se disuelve por efecto de aguas ácidas.
"No podíamos creer que logramos escapar", expresó en su cuenta de Facebook Melanie Wotherspoon, una de las que estaba en el lugar, y agregó: "Pensé que seguramente íbamos a morir y estaba verdaderamente asustada por lo rápido que llegó a nuestro campamento y cómo se lo tragó". Los socavones, en efecto, pueden ocurrir en minutos o en horas. Geocientíficos estudian el área e investigan las causas del hecho.