Francisco habla ante los líderes mundiales reunidos en una cumbre de la Asamblea General de Naciones Unidas. El discurso estará orientado a adoptar nuevos objetivos globales contra la pobreza y la protección del medio ambiente. Al llegar a la sede de la ONU se mostró con el secretario general Ban Ki-moon.
Sus primeras palabras fueron dirigidas a los empleados del lugar. Agradeció a todas las personas que trabajaron para recibirlo en la sede de la organización y les dio la bendición. "Entiendo que están preocupados por el futuro. Debemos preocuparnos el uno por el otro", fue uno de los mensajes que dejó.
"Es la quinta vez que un Papa visita las Naciones Unidas", repasó Francisco en el inicio de su discurso. Dijo que la ONU tiene "es una historia de importantes éxitos comunes en un período de inusitada aceleración de los acontecimientos". Entre los hechos más importantes, mencionó "la codificación y el desarrollo del Derecho Internacional, la construcción de la normativa internacional del Derecho Humano, el perfeccionamiento del Derecho Humanitario, la solución de muchos conflictos y operaciones de paz y reconciliación y tantos otros logros. Todas estas realizaciones son luces que contrastan la oscuridad del desorden causado por las ambiciones descontroladas y los egoísmos corruptivos".
Habló de la "necesidad de mayor equidad" y dijo "la Justicia es un requisito indispensable y la limitación del poder es una idea implícita en el concepto de Derecho. Dar a cada uno lo suyo significa que ningún individuo o grupo humano se puede considerar omnipotente, autorizado a pasar por encima de la dignidad y los derechos de otras personas singulares o agrupaciones sociales".
Aseguró que actualmente existen "muchos falsos derechos y a la vez, grandes sectores indefensos víctimas de un mal ejercicio del poder". Luego remarcó que "existe un verdadero derecho del ambiente".